Encontrar el calor en quien menos te lo esperas, el
cariño en quien creías que lo necesitaba, tras aceptarte por fin a ti mismo
porque que ser imperfecto, no es malo.
Comprobar no solo que no te hace falta
absolutamente nada que de lo que tienes para seguir, sino que te sobra.
Recordar que el arma más poderosa no se compra
ni se vende, que ni siquiera esta en los libros, sino escondida, y solo la
sencillez e inocencia de quien sabe mirar en las cosas mas simples la destapan.
Saber disfrutar del más minúsculo momento y
enjaularlo con las manos, que se vaya escapando por entre
los dedos de quienes lo vivieron, hasta que solo queda el recuerdo efímero de
lo vivido.
Sorprenderse porque la vida es lo que sucede
mientras estamos ocupados haciendo planes y que es el las cosas más pequeñas e
insignificantes que encontramos por el camino donde encontramos la felicidad
porque las personas las hacen grandes.
Y descubrir, una vez más, que todo de lo que te habías convencido se te ha vuelto a hacer añicos delante de tus ojos, dejándote desarmado de nuevo y que, por suerte, tendrás que seguir buscando.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
lights